¿Qué leyes o normativas luchan contra el abandono animal en España?

Noelia Gago 

 Asegurar la protección animal y consolidar la tenencia responsable son dos de los pilares básicos de los veterinarios de clínicas en nuestro país. El trabajo conjunto de los profesionales con las administraciones de las comunidades autónomas es clave para el bienestar de las mascotas y para que los propietarios cumplan las leyes de protección y de civismo. La creación de un registro sobre zoonosis o la puesta en marcha de campañas para evitar el abandono y el maltrato son algunas de las últimas medidas que se están llevando a cabo.

El marco jurídico especifica una serie de obligaciones para el propietario de carácter general como son la identificación de la mascota con un microchip homologado o que conste en el censo del ayuntamiento de la ciudad donde resida. Entre las prohibiciones se encuentran la de abandonarlo, la de comunicar al ayuntamiento en un plazo de 48 horas su desaparición y la prohibición de cortar la cola y las orejas a los animales y extirparles las uñas y las cuerdas vocales, algo en lo que los veterinarios cuentan mucho.

Contra el maltrato y el abandono

La polémica del maltrato animal se ha visto aumentada en los últimos años sobre todo a raíz de iniciativas políticas en algunas comunidades que proponen la modificación del Código Penal para endurecer las sanciones por maltrato.
Mientras llega la Ley nacional de protección animal son varias las instituciones de comunidades autónomas que han creado normativas que luchan contra el maltrato animal. Entre las prohibiciones de Cataluña se encuentran la de abandonar, la de cortar la cola y las orejas a los animales y la de extirparles las uñas y las cuerdas vocales.
En Valencia, la concejalía de Bienestar Animal ha creado un registro sobre zoonosis de mascotas y tiene en marcha la campaña de concienciación “No abandones y cambia una vida adoptando”.
Una de las últimas iniciativas de la Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca de las Islas Belares es la campaña “La vida de un animal no tiene precio”, que pretende concienciar a la población para luchar contra el abandono de animales. Este tipo de acciones son necesarias en una región en la que en los últimos cinco años el Centro de Recuperación de Fauna de Baleares ha registrado 1.997 ejemplares, de los cuales 918 eran por abandono, y en la que cada año se contabilizan unos 200 animales abandonados.

Identificación de los animales

La obligatoriedad del microchip no es capricho de los ayuntamientos, este dispositivo ayuda a encontrar animales perdidos y, algo que nos compete más en este artículo, a descubrir a la persona responsable de un animal en caso de abandono. Los veterinarios trabajan para asegurar que cada animal que atienden tenga su propio microchip. Además siempre que se encuentra un animal en una localidad, los rescatadores pueden acudir a cualquier clínica veterinaria para que el profesional lea el microchip que tiene, ayudando a encontrar al individuo que lo ha abandonado o, si no se encuentra microchip, a que la puesta en adopción se acelere.

Tenencia responsable

Los veterinarios son los profesionales que más tiempo pasan con los propietarios y sus mascotas, por eso es su obligación concienciar a las personas en el cuidado de sus animales así como de garantizar que están cubiertas sus necesidades vitales, controlar que se les pone el chip, recordar que es obligatorio llevarle atado en la calle y que se debe llevar el documento identifi­cativo del censo del animal. Gracias a las campañas de veterinarios y administraciones por conseguir un trato digno de las mascotas, se ha logrado reducir el número de abandonos en distintas comunidades autónomas. Por ejemplo, de los 24.600 abandonos que se registraron en el año 2005 en Cataluña, en 2015 pasó a 22.215, una reducción de los abandonos de un 9,6% en tan sólo diez años, lo que supone 2.385 animales menos (según datos de la Cátedra Fundación Affinity Animales y Salud de la Universitat Autònoma de Barcelona).

Trabajo con las protectoras

Los veterinarios suelen colaborar con una o varias protectoras de su zona abaratando los costes de sus tratamientos y servicios para los animales que viven en esos refugios.
Por otra parte, las clínicas crean campañas de esterilización o de vacuna de la rabia, por ejemplo, para que propietarios con menos dinero aprovechen para proteger a sus animales. Con esta medida se pretende quitar de la cabeza la idea del abandono a quienes no encuentran suficientes recursos para mantener a sus animales.

Prevención

La concienciación sobre la prevención de enfermedades es otro de los retos importantes y más difíciles para los veterinarios españoles. El Consell Valencià de Col·legis Veterinaris presentó a finales de 2017 una red de vigilancia epizootiológica con la que se pretende establecer la susceptibilidad y riesgo de la población animal o humana, plantear las medidas preventivas más adecuadas para evitar contagios, conocer el grado de prevalencia, y monitorizar y detallar la distribución geográfi­ca de estas zoonosis. Con ella se pueden evitar abandonos por miedos y desconocimiento en cuanto a enfermedades zoonóticas.

Retos a corto plazo

Los principales objetivos para la profesión veterinaria en 2018, según el Consejo de Colegios Veterinarios de Cataluña, son: promover un uso racional de los antibióticos para el control de enfermedades, vigilar el incremento de las enfermedades infecciosas, revisar el marco regulador de las empresas veterinarias para garantizar la profesionalidad en estos entornos comerciales y explorar las implicaciones para la regulación de nuevas tecnologías como la telemedicina, tal y como aparece en un artículo publicado por IM Veterinaria.
 fuente: https://www.muymascotas.es/actualidad/mundo-animal/articulo/esta-bien-ponerle-un-cascabel-al-gato-en-el-cuello-611527667388