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sábado, 11 de abril de 2015

La desaladora carece de la autorización para ocupar el dominio público portuario











Eloísa Reverón

La desaladora de la capital, de donde se obtiene el 33% del agua que se consume actualmente en el municipio, no cuenta con título habilitante para la ocupación del dominio público portuario, a pesar de que han pasado ya 14 años desde que se inauguró. Así lo informa la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife en una alegación que ha presentado al proyecto de ampliación de dicha instalación, que será ejecutado por Sacyr Vallehermoso, socio mayoritario de Emmasa (Empresa Mixta de Aguas de Santa Cruz), y con el que el Ayuntamiento persigue alcanzar un porcentaje de agua desalada del 90%, lo que en un futuro abarataría los recibos de los vecinos porque no se tendría que comprar tanta agua a privados. 
Según dicha alegación, el Puerto no autorizará la ampliación de la desaladora hasta que no se regularice la situación administrativa de la instalación. El concejal de Servicios Públicos, el nacionalista Dámaso Arteaga, indica que el Consistorio y Emmasa están trabajando en ello.
Esta alegación de la Autoridad Portuaria al proyecto de ampliación de la desaladora de agua de mar del municipio chicharrero, que se encuentra en Cueva Bermeja (San Andrés), se suma al aviso que envió a Emmasa en diciembre del año pasado sobre el inicio de un expediente de desahucio de las actuales instalaciones, debido a que ni la empresa ni el Ayuntamiento están abonando las tasas por ocupación del dominio público portuario. Ante tal aviso, que fue publicado en la opinión de tenerife, fuentes de Emmasa indicaron que se había pedido información y explicaciones al Puerto sobre dicha deuda, y que se estaba a la espera de una respuesta. "Hemos remitido a la Autoridad Portuaria toda la documentación necesaria y el listado de nuestras instalaciones, así como la superficie que ocupan, por lo que estamos esperando a obtener alguna respuesta sobre la tasa que se debe pagar. Ante esta amenaza de desahucio, y aunque aún no sepamos cuál es la deuda, nuestra intención es resolver este asunto lo antes posible, pues la desaladora es imprescindible para el suministro del agua en el municipio", apuntó en aquel momento el gerente de Emmasa, Alfredo Rodríguez.
Ahora, ante la intención del Ayuntamiento de Santa Cruz y de la entidad Sacyr Vallehermoso de llevar a cabo la ampliación de la desaladora, el Puerto advierte en una alegación que la instalación no tiene título habilitante para la ocupación del dominio público portuario, por lo que no se podrían autorizar dichas obras. Esta alegación aparece en la resolución del Gobierno canario de fecha 27 de marzo en la que se informa de que la Comisión de Ordenación del Territorio y Medio Ambiente de Canarias (Cotmac) ha aprobado ya la declaración de impacto ambiental del proyecto de ampliación de la planta. La alegación de la Autoridad Portuaria no afecta a dicha declaración, pues la Dirección General de Protección de la Naturaleza entiende que la misma, "por su naturaleza", no condiciona el análisis ambiental del proyecto.
Por lo tanto, esta actuación, en la que Sacyr Vallehermoso invertirá 31 millones de euros y que será ejecutada en varias fases entre los años 2015 y 2021, sí cuenta ya con el visto bueno del Gobierno de Canarias en relación al impacto ambiental, pero ahora el Ayuntamiento y Emmasa tendrán que regularizar la situación administrativa de la desaladora. En relación a la declaración de impacto, y aunque ya está aprobada, la Cotmac también exige que el Plan de Vigilancia Ambiental contemple un protocolo exhaustivo de seguimiento de la evolución de las especies marinas de la zona, "incluyendo el seguimiento de las poblaciones de sebadales de ese mismo entorno", dada la cercana presencia de la ZEC (Zonas Especiales de Conservación) Sebadales de San Andrés al ámbito de influencia de los vertidos al mar.
El Gobierno de Canarias advierte de que cualquier modificación del proyecto deberá remitirse a la Dirección General de Protección de la Naturaleza de la Viceconsejería de Medio Ambiente, la cual emitirá un informe acerca de si la modificación es o no significativa desde el punto de vista ambiental. Esta declaración de impacto ambiental caducará a los cinco años de haber sido emitida la autorización sustantiva, aunque en ese plazo no se hubiese iniciado la ejecución de las obras.
En concreto, este proyecto se refiere a la primera de las varias fases en las que se llevará a cabo la ampliación. Consiste en la ejecución de la ampliación de las instalaciones de proceso y control de la actual estación desaladora de agua de mar (EDAM) de Santa Cruz de Tenerife, de manera que se pase de la producción actual, de 21.000 metros cúbicos al día, a una producción final de 48.000 metros cúbicos al día, es decir, más del doble. Para ello, se prevé abordar la ampliación de la obra civil; instalaciones mecánicas y equipos eléctricos de control y automatismo; la instalación de un nuevo bastidor de 7.000 metros cúbicos al día para, posteriormente, acometer el resto de la ampliación con dos nuevos bastidores, de 10.000 metros cúbicos al día cada uno de ellos.
En la actualidad, el 33% del agua que se consume en Santa Cruz de Tenerife es desalada; el 58% es comprada a privados y el 9% proviene de pozos que pertenecen al municipio. Una vez finalizada la primera fase de la ampliación de la planta, el porcentaje del agua desalada pasará al 52%, y cuando termine toda la actuación, este se elevará al 90%, por lo que Emmasa ya no tendrá que comprar tanta agua, lo que posibilitará abaratar el recibo a los vecinos. Pero para poder iniciar los trabajos, y según lo reconoce el propio edil de Servicios Públicos, primero se tendrá que resolver el problema del abono de la tasa al Puerto y regularizar la situación administrativa de la desaladora.
http://www.laopinion.es/tenerife/2015/04/11/desaladora-carece-autorizacion-ocupar-dominio/600256.html

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