El pasado domingo 1 de julio un grupo de
leones atacó a varios cazadores furtivos en Sudáfrica. El ataque de los
depredadores en la reserva de Sibuya acabó con al menos dos personas muertas,
que habían acudido ilegalmente para cazar rinocerontes. Según la
investigación del equipo forense, la cifra de víctimas podría elevarse.
Nick Fox,
propietario de la reserva, ha sido el encargado de denunciar lo
sucedido. Además, también ha compartido en Facebook su versión de lo que
pasó. "Iban armados, entre otras cosas, con un potente rifle con un
silenciador, un hacha, cortadores de cable, y tenían comida para varios
días: todas las marcas de una banda intentado matar rinocerontes para
extraer los cuernos", ha explicado en la red social.
Por otro lado, Fox ha
declarado lo siguiente para los medios locales: "A juzgar por los
zapatos y objetos hallados en la zona, sospecho que dos o quizás tres
(cazadores furtivos) murieron. Los restos estaban esparcidos en una área
muy amplia, lo que dificulta el rastreo en el lugar y la recopilación
de todas las pruebas".
"Aunque
estamos tristes por cualquier pérdida de vidas humanas, los cazadores
furtivos vinieron aquí a matar a nuestros animales; y este desenlace
envía un mensaje muy claro a todos los cazadores furtivos", ha concluido
Fox para la prensa sudafricana convencido de que esto ayude a rebajar las muertes de los rinocerontes. En África un millar de ejemplares son asesinados anualmente.
fuente: https://www.lne.es/sucesos/2018/07/06/grupo-leones-acaba-vida-cazadores/2314287.html
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