Director: Juan Carlos Melian Naranjo. contacto: teldehabla@gmail.com

viernes, 17 de noviembre de 2017

‘El Comentario’ Por Ezequiel López



Volviendo al meollo de la cuestión, aplicamos aquello de que ¡se pelean las comadres se saben las verdades!


Hoy me voy a atrever a acercarme a las grandes tribunas, puede que sea una osadía por mi parte, pero considero que no puedo dejar a mis oyentes y seguidores de este tiempo de comentario-editorial sin mi posicionamiento y sin que ustedes también lo puedan tener en un momento determinado, me explico, los servicios informativos de la Televisión Canaria debe de salir a concurso ahora el próximo año, y quien se lo adjudique va a tener ciento cuarenta y cuatro millones de euros para trabajar durante ocho años. Bueeno, aunque dicho así parezca algo rutinario, se ha convertido en una batalla campal entre los llamados poderosos de los medios de comunicación de la tierra y entremezclados con colegas de la profesión de península.
Esto de los informativos al ciudadano canario parece que solo nos ha preocupado que en Tenerife dicen que solo sacan a Gran Canaria y en Gran Canaria dicen que solo sacan noticias de Tenerife, no seré yo quien diga que ese problema no debe de darse y qué isla goza de mayor tiempo, aunque en honor a la verdad, las veces que he visto la autonómica, los informativos, me ha parecido que tira más pa’allá, pero a lo mejor son cosas mías. Bueno a lo que vamos, parece ser que la historia maquiavélica nace por acá, por el Sebadal, por el Canarias 7, según escuchamos a los informantes, que parece ser, están bastante bien documentados, mis fuentes son el amigo Chavanel, en el programa el Espejo Canario, y Pomares en la Cadena Ser. Según dicen, los periódicos de papel, el Canarias 7 y La Provincia, apenas tienen lectores como para presumir de poder de convocatoria o de influir en la sociedad, se dice que andan entre tres mil y seis mil diarios y entre siete mil y catorce mil los fines de semanas, ya pasó y quedó atrás, aquellos números que deslumbraban a propios y extraños en ventas diarias de veinte y hasta cuarenta mil ejemplares diarios, aparte de los fines de semanas donde se podía llegar a cifras mucho más elevadas. Hoy en día los seguidores, los que compran estos periódicos pueden ser cantidades menores de posibles oyentes de una emisora de radio sin mucho tirón, pero la sociedad aún se rinde ante el papel, sobre todo los políticos, ante la evidencia no podemos negarla.
Pero la realidad es otra muy distinta, se imponen las redes sociales, existen los llamados blogueros o blogueras que tienen más seguidores e influencias que los propios periódicos de papel, que por cierto, en el propio Facebook cualquiera supera a cinco mil seguidores. Y puedo seguir poniendo ejemplos donde los periódicos de papel quedarían muy mal parados, ¡ojo! que esto no es óbice para reconocer la profesionalidad de la mayoría de los trabajadores de esos medios.
Volviendo al meollo de la cuestión, aplicamos aquello de que ¡se pelean las comadres se saben las verdades!, el enfrentamiento entre los medios e informantes mencionados anteriormente, es un combate de titanes, donde queda claro que cuando se trata de mucho dinero les importa poco que se les vea las vergüenzas, se les reconozcan sus maneras de patear el código deontológico de debido cumplimiento, como dejar ver, sus formas de dirigirse al personal implicado en la posible adjudicación de esos informativos, toda una guerra donde poco importamos los que pagamos, pues al fin y al cabo son nuestros dineros los que se van a llevar. A todo esto descubrimos que la TVC, la que dicen ‘La Autonómica’, no cuenta con una mísera cámara en propiedad para poder filmar la posible adjudicación de estos ciento cuarenta y cuatro millones de euros, sí, sí, como oyen, nuestra TV autonómica no tiene patrimonio tangible para poder ejercer y salir al aire con un personal dependiente directamente de la televisión autonómica. No estoy diciendo con esto que sea mejor o peor el remedio que la enfermedad, y a la TVE nos remitimos, que también utilizan nuestros dineros para hacer millonarios a los amigos del gobierno de turno, y arrastrando una deuda que no termina de pagarse por los siglos de los siglos, amén.
Lo que hemos oído y seguimos escuchando sobre esta adjudicación condenada a estar bajo sospecha, poco o nada ayuda a querer que la Televisión Canaria siga existiendo para un bien general, todo lo que ha rodeado este entramado, hoy al descubierto sobre esos informativos y las formas que se están vertiendo para poderse hacer con ellos de manera muy dudosa, difícil lo ponen para que creamos en un concurso donde participen los interesados y que la opción mejor valorada y beneficiosa para Canarias sea la elegida, y aquí paz y en cielo sálvame. A veces nos da la sensación que poco o nada es de fiar viniendo de mano de los contubernios formados por las grandes empresas y políticos y para muestra, no un botón, sino nuestra televisión.

fuente:  http://www.canariasopina.com.es/articulo/22400

No hay comentarios:

Publicar un comentario