Director: Juan Carlos Melian Naranjo. contacto: teldehabla@gmail.com

domingo, 31 de agosto de 2025

BAR RESTAURANTE LA TORTUGA, AÑOS 80, MELENARA, TELDE

 


Los Camareros hablan.

Han pasado unos cuarenta años, los recuerdos son pocos, pero según me voy acordando voy escribiendo.

La historia es larga pero merece la pena.

SI TERRAZA

En aquella época lo regentaba Don Antonio Socorro ( D.E.P.), una persona muy positiva con mucha sangre, amigos de sus amigos y muy buena persona.

DESDE EL MUELLE SIN TERRAZA

Caminaba los años ochenta, recuerdo que en el año 1982 fueron los mundiales en España, donde su mascota era naranjito, ya  yo trabajaba en el restaurante, me viene a la memoria cuando montábamos el expositor del pescado y  que de base tenia piedras de la playa, era la terraza más valorada de Telde, donde el agua llegaba debajo de la terraza, donde cuando las mareas del pino en ocasiones las olas grande salpican y llegaban hasta la terraza, teníamos un futbolín en una parte de la terraza, muchos jóvenes después de echar copas saltaban por la terraza hacía la playa  y no pagaban las consumiciones, por lo tanto decidimos cobrar al momento, llevaba una cartuchera en el cinto para los cobros.

Imagen de redes sociales


Los fines de semana se llenaban sobre todo la terraza, recuerdo que en varias ocasiones los jóvenes de Melenara y los de Salinetas se peleaban en los alrededores del restaurante, y también en alguna ocasión en la terraza, en una ocasión tuvieron que hablar las  chiquillas de salinetas con los figuras de Melenara para que los dejara salir del restaurante.

Tengo el enorme placer de haber conocido la mujer de mi vida, con la que años después contraje matrimonio, una persona especial en mi vida y yo también para ella, gracias María Del Mar por hacerme tan feliz.

Entre la figuras del momento en aquella época, había uno que era muy bueno dando cabezazos, y otro que cuando iba a la terraza se dedicaba a tirar platos para la playa, en donde en muchas ocasiones tubo muchas peleas, me acuerdo de otra figura que tomaba una bebida que era rebajada con agua y se ponía como una moto, le daba por bailar con los hierros que sostenía el techo la terraza.

Los cuatros figuras de turno estaban siempre localizados, donde uno de ellos recibió muchas palizas según él, por la policía  secreta, historias del momento.

Eran tanto los robos, que varias noches nos quedamos a dormir en el restaurante, por suerte nunca paso nada.

El restaurante la tortuga recibió en los años que estuve allí muchos robos, donde siempre intervenía la guardia civil, que bajaba con el coche patrulla  un Land Rober,

Uno de los figuras de la época, hizo un robo de bebidas y golosinas, pues se dedicó a regalar a todos los vecinos que veía las  golosinas, donde la guardia civil lo detuvo en la misma playa.

A mi  jefe le regalaron una caja de ron de una marca extraña, no se vendía, nadie lo quería, me invente ron a la hierba huerto, en un mes vendí la caja de ron, siempre me acuerdo de esa anécdota.

 Había un joven que venía con sus amigos desde Salinetas hasta el restaurante  en una zodiac, la varaba en la playa y a pasar el día en la terraza.

Muchos clientes y sobre todo en su mayoría jóvenes  eran de Salinetas, entre semana la afluencia de público era poca.

En esos años los servicios de salvamento los hacía cruz roja de Telde, donde almorzaban en el restaurante la Tortuga.

Los veranos el edifico la tortuga se llenaba, el hostal la tortuga.

La familia de Don Antonio Socorro siempre trabajo en el restaurante, dando todo por tener un negocio donde el cliente es lo primero.

Un viernes llevaba la bandeja cargada de cervezas, y la chica de turno hizo una payasada para sus amigos y me tiro al completo la bandeja al suelo, no sabía dónde esconderse, todavía estoy esperando que me ayude a recoger lo que tiro, jajajja..

 Algunos días de la semana existía uno clientes que eran políticos de Telde, donde en aquella época Antonio Socorro militaba en un partido, esa noche nos salvábamos con la caja.

En aquellos años tenía una moto vezpino, un día me la escondieron en el almacén, cuando vieron que iba a llamar a la policía me la dieron.   

 

Esta pequeña historia contada 40 años después se la dedico a Antonio Socorro Ravelo y toda su familia, grandes personas.

Gracias al restaurante la tortuga tengo el placer de estar con mi mujer Mari 35 años después.

Gracias a todos los clientes  de Melenara que todavía queda algunos  de cuando iban al restaurante.

Son muchos los clientes de Salinetas que se siente identificado con el bar restaurante la tortuga, gracias a todos ustedes.

1 comentario:

  1. No es bueno olvidar el pasado pero al recordarlo que sea sin nostalgia ni pena. Hacerlo como usted lo ha hecho es gratificante.

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