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Desde hace muchos años, observo que algunos canarios no venden
el producto canario cuando están con foráneos, tanto peninsulares como
extranjeros, por suerte he estado en diferentes empresas de restauración durante más de 30 años, y aprovecho que esto sale a la luz para contar una historia de
tantas que se podría contar.
Pepe es una persona
nacida en la isla de Gran Canaria, que
conoce todos nuestros productos canarios, y más cuando esta persona cuenta con algunos años.
Pepe, va almorzar con unas personas de la península, cuando está en el restaurante el camarero les deja la carta y le ofrece los platos especiales que tiene del día, los peninsulares piden platos canarios, el profesional les ofrece papas arrugadas, gofio, y salta el Pepe, seguro que no le gusta, uno de los comensales pregunta que es el gofio, el camarero le comenta que es harina de maíz tostado y lo mezclan con caldo de pescado, pues lo piden, también les ofrece lapas, de nuevo Pepe dice que salen duras , que igual no les va a gustar a los peninsulares, el camarero les dice que existen lapas con la comida blanca y negra, que las lapas negras son más tiernas, pues se piden este plato, otro plato que ofrece el camarero es las gambas canarias,
(Camarón soldado),
Pepe dice que aquí en la isla no hay gambas, algunos canarios todavía no se han
enterado que la isla está rodeada de agua y nos ofrece de todo los géneros del
mar, algunos no se explotan y otros están prohibido, no se
pescan por su extinción, todo continua bien hasta que llega el pedido
del vino, de nuevo Pepe dando la nota, los vinos canarios son fuertes de
paladar y caros, los peninsulares le dicen al camarero que vinos tiene , el
profesional les ofrece la variedad que hay en el restaurante en ese momento, y
se decanta por un vino de la Geria de
uva de malvasía seco, todo continua bien
incluso cuando el camarero pregunta si falta algo , los foráneos contestan que
los canarios deberíamos de estar orgullosos de los géneros que tenemos en la
isla, llego la hora de hacer el pedido del pescado, los amigos de la península
piden pescado de la isla, el impresentable de Pepe comenta que hay unos filetes
de corvina que están limpios de espina y muy bueno, los peninsulares miran al
camarero, el profesional le dice que el pescado de la isla que en este momento
tenemos, son viejas, gallos , brecas y
chopas, responde uno de los foráneos, pónganos una variedad de ese pescado,
todo transcurre con normalidad hasta
que llega el momento de los
postre, Pepe no dice nada , esta callado, los amigos de la península tomas
huevos moles, mus de gofio y torrijas, estos señores en varias ocasiones nos
dio las gracias por los productos que teníamos en las islas, a aparte de pagar
la cuenta , dejaron una generosa propina.
NUNCA DEBEMOS AVERGONZARNOS DE NUESTROS PRODUCTOS CANARIOS.

Como decimos los canarios "guárdame una echaura del tal Pepe. Es que los hay que lo único que saben hacer es darse de listos cuando en realidad no saben de que se habla.
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