Por José Juan Sosa Rodríguez: Me gustaría creer que el próximo día 30 de mayo, por primera vez y para siempre, vamos a utilizar el Día de Canarias para reivindicar y rememorar nuestras señas de identidad. Señas de identidad que nos han convertido en un pueblo diferente y diferenciado, y no de la forma burda y chabacana que se lleva celebrando desde que instauró esta festividad.
Así es, me gustaría celebrar ese día apartado de un pseudo- folclore que adultera nuestras tradiciones más más profundas. Si, deseo vivir el Día de Canarias alejado de manifestaciones de dudosas raíces culturales y de eventos de mal gusto, que buscan más la masiva afluencia de público –que puedan dar rentabilidad política- y menos una verdadera rememoración de todo aquello que con el paso del tiempo ha ido enriqueciendo nuestro acervo cultural.
No hay comentarios:
Publicar un comentario