Si amigos, todo va cambiando y las relaciones humanas no iban hacer menos. Años atrás hablábamos cada día con nuestros vecinos, de puerta a puerta o desde la azotea mientras tendíamos la ropa, nos reuníamos para oír la novela por la radio, o nos encontrábamos en la tienda de aceite y vinagre.
Todos los de la calle se conocían, éramos casi una familia con la que compartíamos risas y llantos.
En cambio hoy, apenas conocemos al vecino de enfrente o al que vive en el tercero, cuando nos cruzamos por las escaleras, casi no nos saludamos, cada uno va a lo suyo o llevan la cabeza pegada al móvil.
Cada día saludamos a los contactos que tenemos en nuestro teléfono, aunque pasemos meses sin vernos. Las relaciones humanas se basan en poner un emoticono con carita sonriente sin añadir una sola palabra.
Los amigos se reúnen para tomar una cerveza pero, apenas toman asiento, cada uno saca el móvil del que no despega la cabeza salvo para tomar un sorbo de la refrescante bebida y así pueden pasar una o dos horas.
No piensen que estoy exagerando, ya que esta escena la veo con bastante frecuencia. Pero aún más impactante es cuando esto lo hace una pareja, ¡Qué triste!
En 1930 aun no se conocían los móviles por lo que las relaciones físicas eran más frecuentes. Pero con los años las cosas han cambiado, y no siempre para bien, quince años después de esa fecha, lo que manda son las relaciones Online con las que felicitamos por una boda o damos el pésame por un difunto.
María Sánchez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario