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Los camareros hablan
Desde hace muchos años me percato que algunos empleados en las comidas sobre todo de navidad son unos
aguzadores, he visto de todo, desde pedir dos cervezas para una misma persona, pedir güisqui del más caro y
mezclarlo con refresco, ginebras de las más caras y tomársela como si se la
fueran a quitar, beber y beber, porque la empresa paga, también a la hora de la
comida, comían con descontrol incluso guarda el plato debajo de la mesa para
que el camarero le pusiera otro plato, una vez que el servicio de comida estaba
servido, algunos volvían a pedir, y siempre pidiendo bebida sin control,
algunos espabilados pedían hasta tabaco y decía ponlo en la cuenta, el jefe
paga, sobre los postre más de lo mismo, incluso algunos se tomaban tres
postres.
Este despilfarro pasaba cuando los empresarios eran personas mayores, y para quedar bien con los empleados pues miraban para otro lado, los empresarios decían que solo se reunían una vez al año y estábamos de fiesta de Navidad, algunos empresarios sabía que algunos de sus empleados se aprovechaban de las circunstancia para derrochar, algunos de estos empresarios les pasaba la empresa a sus hijos, y las cosas llevarían un cambio a la hora de la comida de empresas de navidad.
Los hijos de estos empresarios, tomaros medidas drásticas,
no podía seguir el descontrol de beber y beber como si fuera una barra libre,
las cosas cambiaron cuando las comidas de navidad pasaban hacer un menú concertado con dos bebidas por persona, un picoteo de
entrada y a elegir un plato como comida principal, dos postres a elegir y
ninguno de los más caros.
Con el tiempo los empresarios más jóvenes, quitaron las
comidas de empresas, a todo esto se añade una crisis mundial.
Ahora aquellos empleados
aguzadores tiene que pagar de su bolsillo la comida de empresa, ya no
pide güisqui del caro, ginebra de la
cara, ya no esconde los platos, ya no pone tabaco en la cuenta, ahora toca
pagar a partes iguales, ahora duele pagar, ahora toca cerveza, postres para
compartir, una botella de vino para cuatro y ron canario blanco.
Los empresarios mayores ya no están, los hijos por
circunstancias de la vida, ya no hacen la comida de navidad.
LOS QUE QUIEREN FIESTAS
QUE LAS PAGUEN.

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