Cada día nos llegan más y más noticias de la gran cantidad de gallinas que son sacrificadas a consecuencia de la gripe aviar. Esto conlleva la perdida de negocios dedicados a la venta de huevos y aves para el consumo humano.
La preocupación ha reinado entre los propietarios de tantas granjas que se han visto obligados a echar el cierre mientras esperan, inquietos, el final de esta plaga.
Por suerte y hasta ahora, este virus aún no ha afectado a ningún humano, sin embargo las alarmas están alertas al conocerse el fallecimiento de un zorro en Aragón. El primer paso ha sido el confinamiento de las aves o, desgraciadamente, deshacerse de ellas definitivamente.
Sin embargo la decisión del confinamiento no ha sido la mejor solución al haberse producido el efecto contrario, pues al estar tantos animales juntos en un lugar cerrado ha hecho que el virus se propagará entre ellas.
La autoridades sanitarias nos aconsejan continuar consumiendo huevos alimento que, a causa de la muerte de tantos animales, esta alcanzando precios elevados pero no por ello debemos dejar de llevarlos a nuestra mesa.
María Sánchez.
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