Todo un accidente por riesgos derivados del trabajo. Aunque en este caso no se trate de los que se suponen a la lucha contra el crimen, sino contra el calor que reina estos días en toda España. La víctima fue un guardia civil del puesto principal de Yaiza, en Lanzarote, que sobre las siete y media de la tarde del pasado jueves debió ser evacuado a un hospital para ser atendido por un golpe de calor mientras le tomaba una denuncia a una ciudadana.
Según ocurrió el jueves —y denunciaba también la Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC)—, un agente del orden tuvo que ser evacuado en ambulancia al sufrir un desmayo mientras se encontraba recogiendo una denuncia a una ciudadana, que al ver el desmayo le evitó que se golpeara en la cabeza avisando a su vez a los compañeros del puesto para su auxilio: «A tu compañero le está pasando algo», les dijo. Llegados al lugar personal sanitario y trasladado al centro hospitalario —Hospiten de Tías— le fue diagnosticado un golpe de calor, ante la rigidez muscular que presentaba además el agente.
Cumplir la ley
«Todo cuerpo policial tiene que velar por el cumplimiento de la normativa de riesgos laborales. Por ejemplo, si al pasar por una obra en construcción advertimos que hay personas trabajando sin el correspondiente casco, debemos efectuar la denuncia del caso. Lo que no nos imaginábamos era que este tipo de incumplimientos pudieran darse en nuestra propia casa», apuntan las mismas fuentes de la AUGC.
Del mismo modo, denunciaron que se encarguen, «en plena ola de calor» patrullas de a pie, por zonas donde el efecto del sol y el calor se siente especialmente, como Playa Blanca o Marina Rubicón, «más teniendo en cuenta que en estos momentos rige el nivel 4 de alerta terrorista». Entienden, de esta manera, que no se cumple el óptimo aprovechamiento de los recursos, puesto que, «teniendo tres coches a disposición, insólitamente se prefiere este tipo de patrullas a pie».
No hay comentarios:
Publicar un comentario