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jueves, 4 de septiembre de 2025

“PLAZA DE SANTA ANA”, LAS PALMAS DE GRAN CANARIA .

Imagen de Google

 Si ayer miércoles mi “Guía Informal y Desenfadada de Gran Canaria” me contaba cosas interesantísimas de la Catedral de Santa, mientras jugaba con “Cartucho” uno de los perros de la Plaza de Santa Ana,  hoy jueves le he   preguntado sobre la historia de esta Plaza que, de siempre me ha tenido intrigado, ya que he escuchado tantas versiones distintas sobre ella  y muy especialmente sobre el origen  de sus famosos “perros” de testículos duros como el bronce que, me gustaría saber que piensa ella, siendo como lo es, “docta” en la materia.

Me miró y comenzó a contarme todo esto de la famosa….

                                 
                                             “PLAZA DE SANTA ANA”,



La Plaza Mayor de Santa Ana, es uno de los lugares más emblemáticos de la Ciudad de Las Palmas de Gran Canaria.

CARTUCHO CON JULIO

Está ubicada en pleno centro del histórico y noble barrio de Vegueta, junto al edificio más importante de la arquitectura canaria; La Catedral de Canarias.

La Plaza Mayor, lleva el nombre de la “Catedral Basilical de Canarias y de la Patrona General de Gran Canaria.

Este asentamiento, me sigue contando mi “Guía Informal y Desenfadada”, fue elegido por los conquistadores que comandaba Juan Rejón, como centro de una de las primeras urbanizaciones de la Islas Canarias. 

En torno a ella, se instalaron las Casas Consistoriales de la Ciudad, El Palacio del Obispo y la Catedral propiamente dicha, que por cierto el llamarla de Santa Ana, se debió que el cómo buen andaluz que era “el pollo”, también  era devoto de la Santa y estaba convencido de que le había salvado la vida a él y a su tropa, avisándolo de una emboscada que le tenían preparada un poco más al Sur, los aborígenes canarí; motivo por el cual se decidió a levantar el campamento en ese mismo lugar, junto a un riachuelo, El Guiniguada y sobre una frondosa “Végueta”, fundando allí mismo la “Real Ciudad de Las Tres Palmas”

Muy cerquita de la nombrada Plaza, destaca el Patio de los Naranjos de la Catedral de Canarias y el Palacio Regental, que viene a ser la residencia oficial del presidente de la Audiencia Territorial.

Pero si algo hace entrañable y simbólica a esta Plaza Mayor, son sus 8 famosos “canes”.

Uno de ellos, me cuenta mi “Guía” que es su preferido, y se llama “Cartucho”, el cual permanece erguido e inmutable, observando como pasa 

El tiempo como la misma Puerta de Alcalá de Carlos III, que tanto nos recuerda Ana Belén con su esposo Víctor Manuel “el estreñido”

Allí su “Cartucho” permanece, junto a sus compañeros de “perrerías” Faycan, Mogano, Tinaya, Bentayga, Tirajano y Tenoya. De estos dos últimos, “los graciosos” le añaden a sus nombres y como aposición al sujeto, dos frases; al primero” Trirajano”, le suman lo de … “agárramela con las dos manos” y al segundo, Tenoya… “agárrame la polla”. Jajajajaja

La verdad es que estos pobres perritos, siempre han sido muy recurridos por los palmeños para hacer chistes; hasta tal extremo que aseguraba Néstor Álamo, que a una tal “Mariquilla La Perrera” al pasar por las Plaza de Santa Ana se les habían “tirado los perros”. Jajajajaja

 ¡Pero que exagerada era esta “Mariquilla la Perrera”Pues, aunque le advertían ¡Cállate María!  no les cuentes nada que, no entran moscas en boca cerrada, ella seguía dale que te pego y aseguraba que…, el perro del tío Juan Pina se les había tirado a las enaguas y partió a correr corriendo al ver lo que le pasaba. Mientras la gente le gritaba, la gente decía… ¡Tápate muchacha! ¡Ya fuerte mordida! Luego parece ser que, acudíó a la fiesta de Jinámar a vender chochos y berros y al salir la procesión, fue y se le tiró otro perro. Y de nuevo la gente le volvía a gritarle lo mismo. La pobre se preguntaba… ¿Si me ocurre en Tafira, o en la Vega, Risco de San Nicolas, yo no sé qué me va pasar? y la gente le gritaba… ¡Esta es la perrera, tápate María. Pero lo peor según nos cuenta cuando fue a Agaete, la tierra del vendaval; va y se le tiró otro perro y le destrozó el delantal; mientras la gente gritaba con mucho aspaviento… ¡Esta Mariquilla es mujer de asiento! 

Pero lo que todavía tuvo mas gracia, fue lo que pasó esta misma semana…, pues se le tiraron “los perros de la Plaza de Santa Ana” y sin poderse defender, ni poderlo remediar, la destrozaron “toita” que, para que les voy a seguir   contando; mientras, la gente le gritaba… ¡Tápate muchacha! ¡Tápate María!  

Jajajajaja qué cachonda y musical es mi “Guía”; como se le nota que “maura”, de Telde y además que, tiene alma marinera.

Pero volvamos a la historia de los famosos perros de la Plaza de Santa Ana, convertidos hoy en símbolos de la Ciudad que, como bien me recuerda mi entrañable amigo palmeño Francisco Fernández Belda, “Pepe Belda” para los amigos…” Ya no huelen a perros, aunque vivirán en bronce hasta qué, el Sol se apague y la Luna deje de platear el lomo de los gatos” Jajajajaja. ¡Grande Pepe!

Los perritos fueron al parecer un regalo que el capitán de un barco francés con destino a Ciudad del Cabo, hiciera al alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, don Felipe Masíu en 1895 y como agradecimiento al buen trato ofrecido a él y a su tripulación durante el tiempo que permaneció fondeado su buque en la Bahía de las Isletas, mientras reparaba una avería qué, les impedía proseguir hasta su puerto de destino final (Ciudad del Cabo), y a donde por cierto, iban destinado los susodichos canes de bronce.

Resultará fácil imaginarse la cara de desconsuelo que, se le quedaría al pobre receptor, cuando se enteró que, sus tan esperados canes, se habían quedado en Gran Canaria.

Los animalitos son obra del escultor francés Alferdo de Jacquemar, quien ya tenia expuestos otros canes similares en ciudades como Málaga o Londres.

Me comenta mi “Guía” que, en principio no gustó a todos por igual; hasta tal extremo qué, el periódico “El Defensor de la Patria” (que, por cierto, nada tenía, tenía que ver con la familia del Pedro Sánchez, actual presidente del gobierno, si es que estás pensando en que de ahí le vino heredado el vicio de traicionar a la patria Jajajaj), se podía leer en su portada… ¡Perrera Municipal!

 ¡Pero que cachondo el Sr. Heredia, periodista!; andaluz y de Cádiz tenía que ser el gracioso “Quillo” de la Plaza Mina, donde se ubica la pastelería del   “Lapida” y muy cerca también de la famosa pensión del “Veneno”

Mi “Guía” me vuelve a recordar qué, el más bonito, chulo y elegante de los 8 perros es su “Cartucho”, a quien él mismo bautizó de pequeño, cuando su padre lo llevaba a Plaza de Santa Ana a espantar a las palomas que allí existían por cientos y luego para acabar, se subía al lomo de su perro preferido.

¡Cuántas cosas tienen mi” Guía! para contarme de la historia de su Gran Canaria querida, qué a mí, y dicho sea de paso, me encanta compartir con todos ustedes, con la esperanza que algún día te las pueda contar también de viva voz que, seguro sonará mejor y para que te me emociones más, porque, no creas…. ¡Casos se han dado!  Jajajajaja


¡Qué cosas!

Fdo:

Julio César González Padrón

Marino Mercante y Escritor




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