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Los camareros hablan
En ocasiones el camarero pasa de ser un gracioso a un
bocaza, pensando el mismo mejor me hubiera estado callado, o bien diciendo
gracias a que no me la pidieron.
Cuatro personas llegan a un restaurante y piden una botella
de vino y la comida, mientras pasa el tiempo piden otra botella de vino, y algo
más de comida, todo transcurre con
normalidad hasta que piden una tercera botella de vino, la comida sigue
siendo un picoteo, una de las personas comentan al camarero, si nos bebemos
esta botella nos invita a otra, el camarero les comenta que si se beben una
cuarta botella la quinta la invita el camarero, dicho profesional siempre
estará aprendiendo, puesto que las cuatro personas piden una cuarta botella de
vino, al profesional se le puso un nudo en la garganta, diciendo el mismo quien
me metería en estos fregados, ahora tengo que invitar a una botella, por suerte
los cuatros comensales tenían una chispa, que no sabían lo que decían, estas
señoras y señores pidieron la cuenta y no tomaron ni café, tenían una
borrachera de primera.
SIEMPRE TENEMOS QUE ESTAR CONSIENTE DE LO QUE SE DICE.
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