Una plaga de aguavivas invade El Confital procedente del norte de la Isla

E. M. O. / J. B. 

Las aguas de la playa de El Confital, en la capital grancanaria, sufrieron ayer una invasión de aguavivas procedentes del norte de la Isla. Por este motivo, el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, a través del Área de Playas, activó el protocolo Red Promar, que consiste en la retirada de los ejemplares que llegan a la orilla y el aviso a los bañistas del peligro existente.

El servicio de limpieza de playas ya comenzó ayer la recogida de aguavivas que se encontraban fuera del agua. Este fenómeno natural, para el que, según fuentes municipales, no se recomienda el uso de redes porque pueden afectar a otros organismos y porque puede fragmentar a las propias aguavivas, está afectando al norte de Gran Canaria y a la isla de Tenerife. Fuentes de la concejalía de Ciudad del Mar del Consistorio aseguran que es probable que la propia marea disperse y expulse la concentración de aguavivas que se encuentra en el agua.

Asimismo, distintas playas del Norte de Gran Canaria experimentaron también, durante la mañana de ayer, una nueva invasión de aguavivas, lo que obligó a municipios como Arucas a colocar carteles de señalización para restringir el baño y evitar así las picaduras a los bañistas.

El volumen de medusas se dejó sentir especialmente en zonas como El Puertillo, donde la bajada de la marea a mediodía dejó a muchos de estos ejemplares en tierra firme. Durante las últimas semanas se había dejado sentir de forma aislada en las playas, aunque es en esta semana cuando el problema se ha acrecentado.

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