La madre de Enrique tiene cáncer. Y no solo eso:además de luchar contra esta enfermedad, le toca lidiar con su seguro médico para que le permitan continuar con su tratamiento en su hospital de siempre. ¿Por qué?
Porque es funcionaria. Como ella, un importante grupo de funcionarios enfermos de cáncer -desde profesores a carteros, policías o militares- han visto interrumpida su asistencia como consecuencia de los recortes económicos del Gobierno en el presupuesto para las mutuas sanitarias este año 2015. De repente les obligan a cambiar de médico, de hospital, y en el peor de los casos ni les indican a donde deben acudir ahora.
Necesitamos tu voz. Ayúdanos firmando y compartiendo esta petición.
Muchas gracias.
Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-F)
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