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Pablo Ruz tomó la decisión de pedir en secreto que la justicia del país helvético autorice a reventar esos tres supuestos depósitos cerrados (dépôts fermés en el argot bancario helvético), en tiempo récord y solo horas después de que la Unidad Contra la Delincuencia Económica y Fiscal (Udef) le informara el lunes de la probable existencia de estas cajas, hasta ahora desconocidas, y le insistiera en la necesidad de saber cuál es el contenido, ante la sospecha de que pudieran guardar papeles relacionados directamente con el caso Gürtelo con otros aspectos de las actividades ilícitas del hombre que controló las cuentas del PP durante dos décadas.
Según los informes confidenciales de la Udef, que dan por descontado que esas cajas no contienen dinero porque jamás hubieran rentado intereses, esos tres «depósitos cerrados» aparecen en los contratos de las tres cuentas que sucesivamente, y desde 1999, Bárcenas abrió en Lombardier bajo los nombres de Novis, Fundación Sinequanon y Tesedul. El extesorero fue cambiando la denominación de esas cuentas y de sus cajas de seguridad conforme avanzaba la investigación del caso Gürtel y comenzaba, a través de Sinequanon y Tesedul, a sacar parte de su fortuna hacia América.
La petición de Ruz a Suiza es que le informe de inmediato de si esas cajas, a nombre de Bárcenas o de sus sociedades pantallas, están aún operativas, «procediendo en caso positivo a su identificación e inmediato bloqueo preventivo hasta que se resuelva lo oportuno sobre la apertura e incautación».
El temor del magistrado es que alguno de los numerosos testaferros o apoderados de Luis Bárcenas pueda viajar a Suiza y llevarse su contenido. Ruz, que incluso escribe de su propio puño la expresión «muy urgente» en el documento, recuerda a las autoridades del país alpino que desde noviembre del 2010 las comisiones rogatorias del caso Gürtel ya no son secretas, por lo que les insta a bloquear esas cajas a la mayor brevedad.
El juez, para evitar dilaciones burocráticas, facilita todo tipo de números de teléfonos y emails a Suiza para aclarar cualquier duda sobre la perentoriedad de cumplir su petición.
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