“BARBENHEIMER”, DEVUELVE A LOS CINES SU ESPERADO PÚBLICO.

“Barbie” de Greta Gerwig y “Oppenheimer” de Christopher Nolan se estrenaron el

pasado día 20 de julio. Raro que dos películas con grandes expectativas de público de lleguen a

las salas de cine el mismo día. En eso, la industria es muy escrupulosa, planificando al detalle

los planes de lanzamiento y distribución.

Tengan en cuenta que un error en esta fase final,

puede dar al traste con todo el trabajo artístico de la película. Pero no, parece ser que la

competencia entre ellas ha producido un “efecto llamada” y han llenado las salas a niveles

prepandémicos. Cosa que “me llena de orgullo y satisfacción” que diría yo no sé quién. La

“batalla” por la taquilla, en la primera semana la ganó “Barbie”. También tenemos que decir

que los públicos potenciales de las dos cintas son muy diferentes. Quizás por eso no compitan

y se sirvan de complemento.

Yo, voy a ver las dos (y quizás me haga un “barbenheimer” y las vea el mismo día. Me

parece encantadoramente surrealista). Una con mis amigos y otra con mis sobrinas. Pero hay

que verlas. “Barbie”, en su primera semana, superó en España un poco más del millón de

espectadores; mientras la de Nolan casi rozó el medio millón. Yo he escrito muchos artículos

sobre el giro del cine y la perdida de adeptos a las salas para ver los estrenos directamente en

televisión. A eso vamos abocados. Quizás, como soñador, este boom “barbenheimer” junto a

la debacle que empiezan a tener las plataformas por sus errores de bulto con el tema de las

suscripciones, vuelva a hacer que la gente quiera volver a disfrutar del cine en pantalla gigante.

Si se diera el caso, las productoras volverían a invertir en películas diseñadas para verlas en

grandes foros. Cosa que ha decaído y mucho, últimamente.

Para acabar, un apunte. “Barbie”, en EEUU recaudó 344 millones de dólares en la

primera semana; mientras que “Oppenheimer” recaudó 177 millones. Entre las dos películas

521 millones. Tom Cruise y Quentin Tarantino han apoyado una corriente para ver las dos

películas en el mismo día. Parece que hizo efecto.

Ahora, Moscú, firma un acuerdo con los países africanos para el suministro de armas

para garantizar la soberanía de sus fronteras (a mi eso me parece un eufemismo, pero es una

opinión, está claro). Lo inquietante del trato es que parte de ese envío de armas será de forma

gratuita y, como bien dice el refrán… “el que regala, bien vende”.

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