lunes, 11 de diciembre de 2017

INVENTOS,EL CARRETE DE FOTOS.





Aseguro, sin temor a equivocarme, que solo con leer el título de este artículo a más de una persona le llegó a su mente aquellas máquinas fotográficas de los años setenta, noventa donde encerrábamos todos los acontecimientos importantes de nuestra vida.
Una vez que el carrete se llenaba con todas las instantáneas que habíamos tomado, corríamos como locos a la tienda de Garavito o a la de los hermanos Suárez Robaina para que nos los revelaran y así comprobar nuestras dotes de fotógrafos.
Recuerdo que estos carretes se vendían para una determinada cantidad de fotos predeterminada, por lo que, según el acontecimiento que fuéramos a inmortalizar comprábamos uno de veinte o treinta dependiendo si la niña hacia la comunión o se nos casaba una hija.
A estas le siguieron las instantáneas y nos lanzamos como locos al nuevo invento que nos permitía observar el resultado in situ.
Poco a poco fueron desapareciendo llevando a la ruina a la celebre Kodak quien no supo adaptarse a los cambios del mercado para finalmente el 19 de enero de 2012 Eastman Kodak declararse en quiebra.
Desde que nos llegó el móvil con cámara, fotografiamos todo lo que hacemos y todo lo que pasa delante de nosotros.
Sepamos quien inventó el carrete.
El contenedor o carrete lo diseñó el científico George Eastman en 1884. Cuatro años más tarde sustituyeron a las placas de cristal que eran usadas para retener las imágenes.
Hablarle hoy a un joven de aquellas cámaras y sus celebres carretes, es tan incomprensible, como hablarle en arameo.
 Mary Almenara

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