Los agentes involucrados son 10 hasta ahora y cinco de ellos se encuentran en la cárcel
Otro guardia civil ha sido imputado en el marco de la operación Botavara, llevada a cabo en la Isla por el instituto armado desde el pasado 21 de febrero y que se ha saldado con la detención de 22 personas, de las que 21 se encuentran imputadas y algunas en prisión, y se ha logrado incautar cerca de una tonelada de hachís. El agente pertenece al destacamento de Gran Tarajal y después de prestar declaración ante los investigadores fue puesto en libertad.
En la citada operación policial se encuentran implicados, hasta el momento, diez guardias civiles. Cinco de ellos se encuentran ingresados en prisión y otros dos en libertad con cargos. Además otros tres agentes han sido imputados. De los 12 civiles detenidos, dos se encuentran en la cárcel de Tahíche, nueve en libertad con cargos y una en libertad.
Las pesquisas se iniciaron a finales de 2012 cuando los mandos de la Benemérita tuvieron conocimiento sobre la actividad delictiva que se estaba llevando a cabo por parte de un grupo de agentes en el cuartel de Corralejo y que tenían también su radio de actuación en Lanzarote. Ante esta situación, se ordenó a la Unidad Orgánica de la Policía Judicial y el Grupo de Información, apoyados por otras unidades del cuerpo policial, al inicio de las investigaciones.
En la madrugada del 20 de febrero se detectó la arribada de una zódiac cargada de hachís, que embarrancó sobre unas rocas en las playas de El Cotillo. Al día siguiente comenzó el reguero de detenciones, entre agentes de la Guardia Civil y vecinos de la citada localidad norteña de Fuerteventura.
El caso fue encargado inicialmente al titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Arrecife, Leandro Martínez Puertas, pero que el pasado 27 de marzo se inhibió a favor de los Juzgados majoreros, recayendo la causa en la juez Nuria Anora Carmona, quien continua con las investigaciones y mantiene el secreto de sumario.
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