Con estos nombres tan peculiares se ha dado por conocer a los nuevos restaurantes que abundan hoy en cada esquina de pueblos y ciudades, todo es estar a la última.
Los hoy llamados bochinches y sus derivados han adquirido renombre, sin embargo estos establecimientos eran muy famosos por la poca higiene que se encontraba en ellos, según diferentes escritos que nos llegan desde los años 1092 hasta el 1948.
En ellos el aseo brillaba por su ausencia por lo que era fácil encontrar cucas, mal olor y todo lo que la suciedad atraía. Para abrir estos negocios solía usarse almacenes o lugares estrechos con escasa luminosidad, lo importante era tener un medio donde poder sacar el sustento para la familia aun a costa de la poca salubridad existente.
Mucho ha cambiado todo y, de aquellos lugares, han salido excelentes restaurantes a los que se les ha dado por llamar bochinches, tal vez con la intención de que no mueran con el paso del tiempo.
En la isla de Tenerife son conocidos por sus maravillosos vinos a demás de la buena comida que ofrecen a quienes los visitan. Muchos de estos establecimientos solo permanecen abierto el tiempo en el que se puede beber el vino del año.
Se llamen de una manera o de otra la hostelería está ganando espacio en las islas puesto que cada vez hacemos más vida social con familiares y amigos, pues siempre es más agradable tomar acompañados que solos.
María Sánchez.
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