El pasado jueves 20 de junio las instalaciones de la Sociedad Cultural y de Recreo el Tabaibal de San Antonio, acogió a algunas miembros del colectivo-asociación del proyecto Yoti que, hace unos días, dimos a conocer a través de el anuncio de su convocatoria en dicha Sociedad.
A ella acudieron vecinos, interesados y curiosos que fueron acogidos en un círculo en el centro del salón social.
Las monitoras del proyecto mostraron sus obras a los y las presentes explicando cada una de sus causalidades y el perfil del menor que se beneficiaría del muñeco de apego.
Les recordamos que el proyecto Yotis fue creado por cuatro mujeres que se dedicaron a crear, coser y trasladar muñecos de apegos para niños en circunstancias especiales. Como Asociación sin ánimo de lucro, las donaciones son escasas o nulas, tanto de particulares como de instituciones públicas.
El objetivo de esta convocatoria en la Sociedad El Tabaibal, no era otro que dar a conocer su esfuerzo totalmente altruista, para un fin que debería despertar las conciencias del común, además de fomentar la donación de retales de telas, hilos, guata o, incluso, aportar mano de obra desinteresada por aquellas personas que cosen por hobby o para causas concretas y que quieran ayudar a que estas mujeres (también aceptan hombres, aunque no se han presentado ninguno a coser), a que los pedidos de los necesarios y terapéuticos muñecos de apego, lleguen a sus destinatarios/as.
En esta ocasión y, aunque no hubo gran avalancha de participantes, recibieron donaciones de todas las personas que fueron y también donó la Sociedad Cultural y de Recreo El Tabaibal.
El acto transcurrió con tanta complicidad que todos los presentes salieron del salón con agradecimientos por ambas partes: unas que agradecieron el tan costoso material y los otros por el magnífico trabajo que hacen las costureras y por la labor social que incluye en ella.
Agradecemos a las nueve mujeres que trabajan sin descanso en el proyecto Yoti que hayan venido a la Sociedad a mostrarnos lo que hacen y el cariño con el que lo realizan y también que hayan sido capaz de convocar a las personas más comprometidas que, todas y cada una de las que asistió, llevó algo en sus manos para el fin último de este colectivo.
Gracias a movimientos como éste, sabemos a aún queda gente estupenda, altruista y comprometida en las islas.
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