REGRESA A CANARIAS LA AMENAZA DE LAS EXPLOTACIONES PETROLÍFERAS

En enero del año 2105,  Repsol anunciaba su intención de renunciar a su proyecto para la extracción de hidrocarburos en aguas próximas al Archipiélago canario.

 

 Aunque los planes de la multinacional  habían suscitado un importante rechazo entre la población canaria, el movimiento ciudadano contra dicho proyecto no logró ser lo suficientemente fuerte como para paralizarlo. La decisión de la petrolera fue tomada en base a un cálculo mercantil, después de que sus estudios condujeran a la conclusión de que los yacimientos que habían encontrado no tenían "ni el volumen de la calidad suficientes" para que resultara rentable extraerlos.

   De esta manera, el grave peligro que se cernía sobre el medioambiente y la economía de las Islas, como consencia de un proyecto cuyos multimillonarios beneficios habrían sido expoliados por la transnacional, parecía desvanecerse.

   Sin embargo, tres años después Marruecos ha adjudicado a la compañía ENI los permisos para realizar sondeos petrolíferos frente a las aguas de Lanzarote y Fuerteventura.

   Las prospecciones ocuparán un área de 23.900 kilómetros cuadrados en una profundidad de 1.000 metros.

   Según informa el periódico monárquico ABC, la empresa ha recibido el permiso después de que Marruecos haya llevado a cabo análisis batimétricos y sísmicos "de muy alta resolución y con equipamiento técnico adquirido en 2015".

  Los sondeos se realizarán  frente a las ciudades de Sidi Ifni, Tan Tan y Tarfaya. ENI tiene el 75% de participación en estos depósitos y el resto está controlado por Onhym.

     Además, las autoridades marroquíes han anunciado la creación de la zona industrial de Tarfaya que costará 8 millones de euros y contará con 35 hectáreas para saneamiento, electrificación, cableado de telefonía e iluminación pública y estudios de ingeniería civil.

fuente:    http://canarias-semanal.org/not/21685/regresa-a-canarias-la-amenaza-de-las-explotaciones-petroliferas/