Otro nuevo caso de corrupción salta a la palestra mediática tanto a nivel nacional como fuera de nuestras fronteras. No puede ser de otra forma cuando uno de los detenidos es el expresidente de la Comunidad de Madrid.
La Guardia Civil habla de al menos ocho posibles delitos: prevaricación, organización criminal, malversación de fondos públicos, cohecho, blanqueo de capitales, fraude, falsedad documental y corrupción en los negocios. En los últimos años también nos hemos enterado de los casos Emarsa y Acuamed en la Comunidad Valenciana, aunque esta última empresa dependa del Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente. Esto también pasa en otras comunidades con casos similares de diferente entidad. Y yo me pregunto: ¿qué tiene el negocio del agua?
Está claro que el agua, un bien de primera necesidad, es una golosina para la ambición de muchos empresarios y políticos, el negocio redondo, lo que todos consumimos y necesitamos. Podrás protestar si te suben el precio, pero no puedes dejar de consumirla. Y esto ha llevado a que políticos sin escrúpulos se beneficien de ella, y a que empresarios sin ningún código ético y moral apuesten por incrementar sus beneficios. Participar en el negocio del agua se ha convertido en España en uno de los principales sectores que generan más enriquecimiento personal.
Por muchos son conocidas las reiteradas denuncias que he realizado desde que soy concejala de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria contra la corrupción que creemos puede existir en Emalsa. Hablamos de los mismos delitos que la Guardia Civil investiga en la Operación Lezo. Muchas analogías que me hacen preguntarme si más pronto que tarde la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria abrirá informativos nacionales por la manera en la que algunos han hecho del agua su propio negocio.
Beatriz Correas es portavoz municipal de Ciudadanos (Cs) en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria
http://canariasnoticias.es/opinion/el-negocio-del-agua
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