martes, 31 de mayo de 2016

La irrupción de un magrebí en el arsenal de Ferrol provoca la revisión de sus protocolos de seguridad


Ni iba armado ni tenía motivaciones islamistas, al menos según lo que se sabe hasta ahora. Pero la entrada de un joven marroquí en el perímetro del Arsenal de Ferrol ha despertado preocupación en la Armada.
Ocurrió el pasado 18 de mayo por la mañana. Los militares que se encontraban haciendo guardia en la puerta del arsenal –la Rúa Argüelles- vieron a un joven de aspecto magrebí acercarse hasta la entrada con intención de acceder al recinto.
Tras prohibirle el paso, el joven –de nacionalidad marroquí y de 23 años de edad- comenzó a vociferar en árabe. Los militares que guardaban el acceso decidieron cerrar la puerta por seguridad, pero el hombre consiguió entrar a la carrera en el recinto en dirección al muelle.
Durante los algo más de 50 metros que recorrió a la carrera sonó un disparo alaire, efectuado por uno de los militares como advertencia. Finalmente se lanzó al agua a pocos metros de donde se encontraba amarrada una fragata.
La seguridad de la base consiguió sacarle y retenerle hasta que fue detenido. Un juez militar de Coruña ha decretado su ingreso en una prisión militar de Madrid como medida provisional. Sobre el joven pesa una orden de expulsión del país previa al incidente.
Según las fuentes consultadas por ECD, la voluntad del joven magrebí eraparalizar su expulsión del país mediante la comisión del delito. Sin embargo, en un primer momento no se descartó ninguna opción, incluida la de una acción terrorista o una “prueba de los sistemas de seguridad de una instalación de la Armada”.
Lo cierto es que pese a lo anecdótico de lo sucedido, en la Armada se ha tomado muy en serio el hecho de que en plena alerta antiterrorista haya sidorelativamente fácil burlar un control de acceso a unas instalaciones militares que albergan parte de la flota de fragatas F-100, las unidades más avanzadas de la Armada.
El nivel de alerta actual, 'Alfa Plus', conlleva un refuerzo de la seguridad en el acceso a instalaciones militares. Desde su activación, los militares que custodian accesos a enclaves militares de alto valor estratégico –como el arsenal de Ferrol- deben llevar armas largas y chaleco antibalas. Además se debe realizar con celo las tareas de identificación de los visitantes exteriores.
La investigación en marcha, explican las voces consultadas, incluye una revisión de los protocolos de seguridad para determinar si es necesario realizar algún refuerzo en la forma de proceder ante una situación similar que se dé en un futuro.
fuente . http://www.elconfidencialdigital.com/defensa/irrupcion-Ferrol-revision-protocolos-seguridad_0_2719528030.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario