La dimisión de José Manuel Soria, precipitada por los papeles de Panamá, deja un legado envenenado a la persona que le suceda en el ministerio de Industria, Energía y Turismo. Solamente en el campo de la energía, la gestión de Soria ha sido contraria a los intereses generales y favorecedora de intereses empresariales en numerosos ejemplos.
El último, ayer mismo. Conocíamos como su Ministerio (en funciones) ha autorizado en Cantabria ampliar el plazo a dos proyectos de fracking (con la oposicón mayoritaria y manifiesta del Parlamento), que habían alcanzado su límite de concesión sin poder llevarse a cabo, y en los que participan Gas Natural y Repsol.
El ministro o ministra entrante (en funciones o en el pŕoximo gobierno) se encontrará los siguientes retos:
El ministro o ministra entrante (en funciones o en el pŕoximo gobierno) se encontrará los siguientes retos:
Todo ello es imprescindible para corregir los errores a los que nos ha llevado su política energética, que junto con su secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, han apostado firmemente por los combustibles fósiles y la nuclear y han llevado a cabo un boicot sin precedentes tanto en las energías renovables como en la eficiencia energética. Su gestión ha estado condicionada por los intereses de las grandes energéticas como Repsol, Iberdrola, Endesa o Gas Natural. El resultado y sus logros son:
Soria cierra la puerta. Pero falta saber si esa puerta será giratoria, y si alguna de las empresas energéticas (y no sólo) que se han visto beneficiadas por sus políticas terminará fichando al exministro.
¿Qué puedes hacer tú?
Empezar por deconstruir su última obra: la prohibición del autoconsumo. Firma para pedir que no se ilegalice el autoconsumo.
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