Los socios y socias conquistan el Arctic Sunrise

Domingo 210-14h puertas abiertas
16-20h puertas abiertas

Una vez más uno de los barcos de Greenpeace ha llegado a nuestras costas para luchar contra una amenaza contra el medio ambiente. En este caso su presencia se debe a la campaña para frenar las prospecciones de petróleo en nuestros mares y para reivindicar un modelo energético sostenible.

El barco que estos días recorre distintas localidades de las Islas Canarias no es un buque cualquiera: es el Ártic Sunrise, que pasó 10 meses retenido en Rusia por una acción pacífica para luchar contra la explotación petrolífera en el Ártico.

Todos queremos visitar el barco, es algo nuestro. Pero este barco es sobre todo de nuestros socios y socias. Gracias a ellos existe y gracias a ellos está donde está.

Las compañeras del Servicio de Atención al Socio hemos viajado hasta los puertos donde ha ido atracando para poder enseñarle nuestro orgullo a los socios. Nos vamos cargadas con pegatinas, marcapáginas, postales, chapas y piruletas y a pesar de que la maleta nos pesa como un yunque en cada desplazamiento merece la pena. La satisfacción de los socios hace que nuestro esfuerzo tenga la mejor recompensa.

En Málaga el sol nos acompañó en todo momento. En Lanzarote, la competencia del fútbol y una ubicación en puerto complicada, nos hicieron temer una menor afluencia, pero como siempre, nuestros socios y socias respondieron y acudieron a conocer el emblema de la organización y la campaña que desarrollamos contra las prospecciones y a favor de las renovables.

Desde el Servicio de Atención al Socio trabajamos día a día para dar lo mejor a nuestros socios y compartimos con ellos la alegría e ilusión de conocernos por fin personalmente después de escribirnos o hablar por teléfono tantas veces. Cada uno con su historia, sus preocupaciones y sus dudas.

Sois miles los que habéis visitado el barco y desde aquí queremos agradeceros vuestra visita y vuestra colaboración día a día, defendiendo nuestras campañas, que son las vuestras.

Nos acordamos de Diego Arrebola, que ajustó los tiempos y que pudo visitar el Arctic Sunrise y aún disfrutar de su otra gran pasión, el fútbol. O de Ana Yebrás, una de esas socias que representa como nadie el espíritu de lucha y el compromiso de nuestra organización y que visitaba el barco por primera vez. Escuchar cómo decía al salir que estaba "orgullosa de ser socia" y que la visita le reafirmaba en sus ideas, fue para nosotros un regalo.

Otra socia estaba emocionada ante la posibilidad de conocer a alguno de los 30 del Ártico(estaban en la tripulación Ana Paula, "Big John", Colin, Haussmann, Paul...) y encontrarse en el mismo lugar donde habían estado “estos héroes, estos valientes” cuando las fuerzas rusas asaltaron ilegalmente el barco. Fue una experiencia única y sintió que era un orgullo pertenecer a Greenpeace. Todos los socios nos dijeron que les había emocionado la visita y salían más convencidos y seguros de pertenecer a nuestra organización.

Ahora estamos en Gran Canaria, donde volveremos a poner todo nuestro corazón para quetodos los socios que quieran puedan subirse a uno de nuestros iconos y sentirse, más que nunca “guerreros del arcoíris”.