El pasado jueves, el alcalde del municipio grancanario de Sta. Brígida y consejero de Deportes del Cabildo de Gran Canaria, Lucas Bravo de Laguna,anunciaba públicamente que dejaba su cargo como primer edil de la corporación satauteña, para "centrar sus esfuerzos tanto en el Cabildo como en los órganos locales e insulares de su partido
A modo de despida
Bravo manifestó que "ha sido un honor trabajar juntos para mejorar nuestro municipio desde este puesto al que hoy renuncio". "Seguiré trabajando para aportar mi granito de arena en el progreso y mejora de nuestra querida Villa desde los cargos orgánicos que ostento en el partido y desde el Cabildo de Gran Canaria" - añadió a través de una nota oficial.
Sin embargo, pese al pretendido tono emotivo del mensaje, lo cierto es que al ya ex primer edil de Sta. Brígida fue acusado desde el comienzo de su mandato de incumplir sistemáticamente sus obligaciones como alcalde. Una denuncia en este sentido realizada por la Asamblea del 15M del municipio era respondida en 2011 por el político derechista con la imposición de una multa de 750 euros a uno de los miembros de este colectivo, que posteriormente retirarían los tribunales.
En el mismo sentido, el pasado viernes Izquierda Unida Canaria en Sta. Brígida manifestaba que "con una medida que debería haber tomado al día siguiente de las elecciones, Lucas Bravo ha abandonado el barco y la ficción de figurar como alcalde de un municipio que ni le ocupa ni le preocupa".
"Se marcha -sostienen desde IUC - sin pena y sin gloria, dejando como herencia a la concejala de Urbanismo (que presenta como garantía de su incompetencia el no haber sabido solucionar ni uno solo de los problemas urbanísticos que aquejan a la Villa), y el recuerdo amargo de sus comentarios maleducados y machistas en los plenos, muchas fotos sonrientes, muchas placas, y ninguna eficacia".
Y es que, para esta formación política, el balance de los años que el hijo del presidente del Cabildo permaneció al frente del consistorio "es desolador".
"Se larga -dicen - imputado por el caso Brisan, con un cúmulo de sentencias e indemnizaciones millonarias pendiendo sobre la cabeza del Ayuntamiento, cuando laSociedad Municipal de Deportes está arruinada, el Plan General sin aprobar, el SAU-2anulado por la Justicia, la Urbanización Los Laureles convertida en un foco de marginalidad, subidas espectaculares en el IBI y las tasas de la basura, el comercio local paralizado, los barrios abandonados y sin atreverse a resolver antes de irse el conflicto con FCC por el edificio ilegal del Centro Comercial (El Mamotreto)".
"En su comunicado de despedida -concluyen desde Izquierda Unida - Bravo aún ha tenido la desfachatez de agradecer el inmenso apoyo recibido, cuando el único apoyo unánime de los vecinos es a su dimisión".
fuente : http://canarias-semanal.org
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