Este juego, que últimamente se ha puesto tan de moda, nos viene de tierras mexicanas,
concretamente de Acapulco allá por 1969.
El que hoy se juegue en España se lo debemos a Alfonso de Hohenlohe quien después
de un viaje que hizo por aquellas tierras de rancheras y tequila y aprovechando su
influencia en Marbella abrió las primeras pistas, por lo que se conoció como deporte de
pijos.
Al principio fue un deporte creado para los ricos que veraneaban en una de las isla más
famosa de las Baleares, lugar de encuentro de la jet set en aquellos años.
Sin embargo hoy, es un ejercicio al alcance de cualquier mortal que desee pasar un rato
haciendo deporte con amigos o familiares.
A menos que usted se dedique a jugar como profesional, puede practicarlo en un club
que disponga de una pista rectangular cerrada, calzar zapatillas cómodas, pantalón
corto, y como no, una pareja con quien practicarlo.
España ocupa el primer lugar, seguido de Argentina, donde hay más equipos, tanto
femenino como masculino que compiten de manera profesional.
Visto de este modo podemos decir que el pádel ha dejado de ser un deporte de
gente rica y pija, para convertirse en un entretenimiento al alcance de cualquier
mortal.
Mary Almenara.
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