sábado, 23 de julio de 2022

Telde la Ciudad viva que fue

 

Imagino que todos en más o menos memoria, recuerdan a nuestra ciudad de Telde.
Yo por mi parte recuerdo una ciudad llena de vida, amén de las situaciones familiares normales de un pueblo con o sin dificultades.
Recuerdo una ciudad alegre, gente en sus calles, los comercios ocupaban calles completas a las dos bandas.
Telde la (ciudad del mueble), no era eso solo, era el bullicio de una ciudad viva, porque son los ciudadanos quienes les dan vida a las mismas.
Tardes de cines: Arauz, Atlanti, Silva, Cervantes, Cinema Telde, Capri, a la hora de la salida la gente llegaba por María encarnación Navarro a la heladería Cazorla, o a la dulcería Los Perez.
Dias de olor a pan recién hecho, a las tardes de churros y de ventas de todo tipo de artículos, peleterías, librerías, ropa, novias, menaje etc.
San Gregorio era un hervidero.
Y por la tarde noche Telde tenía bailes para todos los gustos: La Odl-Car, Letty, La Fraternidad, El Casino en San Juan y otras tantas que también disfrutamos.
Telde tenía veladas de Lucha Canaria, con luchadores de renombre, fiestas divertidas etc.
Un movimiento vecinal que fue creciendo dando voz a las necesidades en los barrios.
Grandes personas, que dedicando parte de su tiempo hacían en las AAVV actividades, para sus vecinos.
Las comisiones de fiestas, de puerta en puerta para hacer unas fiestas, donde las verbenas eran el broche más deseado cochitos, ventorrillos etc.
Eso ya casi se ha perdido. 
Casi no hay movimiento vecinal, la politización del mismo en algunos casos, el hartazgo e incomprensión acabaron con ella.
Solo el Roque Azucarero mantiene hoy por hoy ese espíritu libre, activo, plural, respetuoso, colaborador etc 
O por lo menos que yo sepa, pero ojalá hubieran muchas más.
Pienso que esa es una de las claves de la situación moribunda de nuestra ciudad.
Pero no la única.
Creo que se perdió una oportunidad cuando se peatonalizo el centro, para hacer aparcamientos subterráneos, al igual que en las ramblas, creo que eso facilitaba que el comercio siguiera vivo.
Puesto que nos guste más o menos, nos hemos hecho cómodos y queremos todo a la mano.
Seguro que ustedes recuerdan muchas más cosas que daban vida a nuestra ciudad de Telde hoy medio muerta..... 
Ojalá algún día reviva y vuelva a ser lo que fue.
 lidya esther almenara

 

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