Buenas tardes a todas y todos. Gracias por compartir una tarde más un comentario con otra visión, otros ojos, otra pluma. Hoy: “El reto”
Comienza el 2019 con las campanadas de
fin de año del presidente Clavijo, algo más de 500.000 euros por ahora,
para el autobombo; la toma de posesión del presidente del Brasil el
ultraderechista Bolsonaro y sin dejar atrás el órdago que VOX ha lanzado
a sus correligionarios de la derecha en Andalucía, PP y Cs para que se
retiren las ayudas a la violencia de género y aunque Cs, ha salido por
todos sus flancos para asegurar su compromiso con la igualdad y su lucha
decidida contra la violencia de género ya sabemos que dicen una cosa y
hacen justamente la contraria, la hemeroteca está ahí.
En este nuevo año he ido anidando en mis
fueros, un reto, descabalgar de mis lomos a personas tóxicas que impiden
el desarrollo personal, que manipulan e incitan a insidias para
colocarse en posiciones de ventaja con respecto a otras, y eso ahora
mismo, se va sucediendo de cara a los próximos comicios electorales. No
hay peor mentira que una verdad a medias y cuando escuchas algunos
programas de radio o televisión, donde sus verdades, se cogen con
alfileres me asusta, porque con ese lenguaje populista han logrado
despertar el animal que llevan dentro, la injusticia, la desigualdad, la
misoginia, la intolerancia, la homofobia, transformándose en
abanderados de la peor cara que debe tener un ser humano, con respecto a
otro, la indiferencia.
Pero el reto, no solo va encaminado a
alejar de uno a quienes día a día reescriben la historia a su libre
albedrío e interés, utilizando de forma sesgada los acontecimientos o
simplemente, mirando para otro lado, incapaces de tomar decisiones, que
alejen la percepción que anida en muchos grupos humanos, de que se es
indolente. Se trata también de reconocer lo bueno que tenemos, el camino
que hemos recorrido, sus aciertos y errores, para mejorar, pero sobre
todo para crecer como persona, reconociéndonos en el espejo, en ese
espejo que ocultamos porque es más fácil suponer que constatar, porque
es más fácil dejar que adornen nuestros oídos, a decir lo que se hace y
no hacer lo que se dice.
Me asustan en este reto los populismos,
tanto los conocidos como los guardados bajo la piel, dando rostro de
oveja cuando son lobos. Porque se actúa de la misma manera, a unos los
conocemos porque braman y gritan, enarbolando símbolos de los cuales se
apropian, a otros porque con sus silencios cómplices, sus medias
verdades, su miedo a enfrentarse a sus complejos los tenemos al lado. Se
nos abre un horizonte plagado de promesas, de propuestas, de
compromisos. Hasta mayo, estaremos asistiendo a una especie de opera
bufa, a una suerte de puesta en escena donde no solo se va a valorar lo
que se propone, sino quien lo propone y como lo propone, ya nadie se
escapa al desconocimiento de las apuestas que hay en el tablero, quien o
quienes mueven pieza y sobre todo las piezas a batir. Se trata pues de
un juego, del ego, se trata de poder.
Los populismos han venido para quedarse,
para que salte por los aires lo que denominan la ideología de género,
para quebrar los derechos que hemos ido conquistando, para minar nuestra
voluntad de seguir luchando por derechos de ciudadanía, los otros
populistas, los de andar por casa, los que se han silenciado, los
incapaces de dar un golpe en la mesa para evitar tropelías les pediría
decencia, si la tuvieran claro…, con la pluma del Faycan.
fuente: https://canariasopina.com/2019/01/04/gregorio-viera-el-reto/
No hay comentarios:
Publicar un comentario