Greenpeace ha presentado los correspondientes escritos de impugnación a los recursos de apelación formulados el pasado mes de enero por Ministerio Fiscal, en primer lugar, e Iberdrola y la empresa de seguridad de Cofrentes en segundo lugar contra la sentencia dictada el pasado mes de diciembre por el Juzgado de lo Penal número 11 de Valencia en el juicio de los 17 de Cofrentes. Dicha sentencia absolvió de los delitos de desórdenes públicos y lesiones a los 16 activistas y de todos los delitos al fotoperiodista independiente, Pedro Armestre. Estas actuaciones se trasladarán de nuevo a la Audiencia Provincial de Valencia para que estudie los escritos de recurso e impugnación de las partes, y dicte de nuevo sentencia. Greenpeace impugnó estos escritos el pasado 5 de febrero .
“Nuevamente se quiere criminalizar a Greenpeace recurriendo una sentencia que absuelve a sus activistas, y que no dejó sombra de duda sobre la protesta pacífica de los 16 activistas y la labor informativa independiente del fotoperiodista”, ha declarado Mario Rodríguez, director de Greenpeace España. “No van a impedir que sigamos luchando pacíficamente para que se ponga fin a la peligrosa, insegura y cara energía nuclear y se apueste por las energías renovables. Nos avalan más de 40 años de activismo pacífico por el medio ambiente y continuaremos con nuestra labor”.
El 15 de febrero de 2011, 16 activistas realizaron una acción de protesta pacífica en la central nuclear de Cofrentes. Pintaron “PELIGRO NUCLEAR” sobre una de las torres de refrigeración, y por ello la Fiscalía, Iberdrola, y la compañía de seguridad privada pedían penas de dos años y ocho meses de cárcel, así como una multa e indemnizaciones de casi 360.000 euros para Greenpeace como presunto responsable civil subsidiario. El fotoperiodista independiente, Pedro Armestre, se exponía a las mismas penas que los activistas.
Junto a la absolución de delitos de desórdenes públicos y daños, el único delito que recogió la sentencia dictada por el Juzgado de lo Penal número 11 de Valencia en diciembre fue uno de daños a la central por la rotura de la valla y otros daños menores para los 16 activistas. Por ello, se les condenó a pagar 2.232 euros por la rotura de dicha valla más una pena de multa de seis meses con una cuota diaria de seis euros, que asciende a un total de 17.280 euros. Esto significa que la multa inicial y las indemnizaciones solicitadas por Iberdrola y las acusaciones son de 357.371 euros a Greenpeace como presunto responsable civil subsidiario se rebajan hasta 19.512 euros.
La organización ecologista subraya que el pacifismo de los 17 de Cofrentes queda refrendado también por las cerca de 200 organizaciones y personalidades que han mostrado su apoyo públicamente a la protesta pacífica en el recinto de la central nuclear de Cofrentes.
Junto a la absolución de delitos de desórdenes públicos y daños, el único delito que recogió la sentencia dictada por el Juzgado de lo Penal número 11 de Valencia en diciembre fue uno de daños a la central por la rotura de la valla y otros daños menores para los 16 activistas. Por ello, se les condenó a pagar 2.232 euros por la rotura de dicha valla más una pena de multa de seis meses con una cuota diaria de seis euros, que asciende a un total de 17.280 euros. Esto significa que la multa inicial y las indemnizaciones solicitadas por Iberdrola y las acusaciones son de 357.371 euros a Greenpeace como presunto responsable civil subsidiario se rebajan hasta 19.512 euros.
La organización ecologista subraya que el pacifismo de los 17 de Cofrentes queda refrendado también por las cerca de 200 organizaciones y personalidades que han mostrado su apoyo públicamente a la protesta pacífica en el recinto de la central nuclear de Cofrentes.
Greenpeace es una organización independiente que no acepta dinero de gobiernos ni empresas para poder denunciar a todas aquellas personas o instituciones que amenazan al planeta. Solo el apoyo desinteresado de nuestros socios y socias hace posible nuestro trabajo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario