La sorpresa lacrimógena de Patiño y la peor pesadilla de Raquel Bollo

Ningún problema. Eso es lo que tuvo Telecinco este viernes noche para liderar cómodamente el prime time sin quebrarse demasiado la cabeza.

El Deluxe sentó en plató a dos clásicas, Raquel Mosquera y Aguasantas, exnuera polémica y televisiva de Raquel Bollo, y a funcionar en los audímetros. Un 17.4% de cuota de pantalla y cuatro puntos por encima de su inmediata perseguidora.

Entre otras cosas Raquel Mosquera "demostró" a golpe de polígrafo que las sospechas de montaje eran falsas, al menos en lo que se refiere al aborto que sufrió hace no mucho del hijo que esperaba con su nuevo novio Isi. Pocos daban un duro porque eso fuera cierto, pero el polígrafo le da la razón.


Por otro lado, Aguasantas de nuevo en plató para buscarle las cosquillas a Raquel Bollo. Días después de conocerse la noticia de que Aguasantas y Manuel Cortés, hijo de Raquel Bollo, habían retomado brevemente su relación, la extronista de Mujeres y hombres y viceversa visitó el plató de Sálvame Deluxepara contar cuál ha sido el motivo de su segunda ruptura con el cantante. Ella culpa a la colaboradora de Sálvamede ser la responsable de su ruptura con Manuel. Además, aportó unas grabaciones que han dejado con la boca abierta a todos los colaboradoras que se encontraban en el plató. Por si fuera poco, señaló que Raquel Bollo "me da miedo porque no sé hasta donde puede llegar".

Y para rematar el Deluxe, la sorpresa de la presentadora sustituta. Este viernes era el cumpleaños de María Patiño y quiso celebrarlo en el "riguroso" directo con una sorpresa a sus compañeros, y otra para ellas. Patiño estuvo toda la noche anunciándolo: "tengo una sorpresa para mis compañeros", y por fin llegó el momento. La presentadora anunció la sorpresa con una frase que no dejó indiferente en las redes sociales: "Mi cumpleaños siempre fue el 15 de agosto, claro, desde que nací". DespuésMaría quiso regalar a sus compañeros unos caramelos, ya que ella nunca pudo hacer esto en el colegio pues siempre eran vacaciones. Después de que diese esa sorpresa a sus compañeros de programa, le tocaba a ella. Por teléfono entró su tío "chicho", quién con unas bonitas palabras hizo llorar a la presentadora de la emoción. Finalmente el programa la llevó una estupenda tarta con velas, donde Patiño sopló las velas y pudo pedir un deseo para este año.
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